Las revisiones visuales periódicas pueden prevenir hasta el 50% de los casos de pérdida visual.
La revisión completa por un optometrista puede detectar posibles patologías a tiempo que comienzan con una pérdida de agudeza visual. Siempre, que entendamos que esa pérdida de agudeza visual no va a poder ser corregida con una nueva graduación o con un cambio de gafas, informaremos al paciente para que pueda acudir al servicio de oftalmología y poder detectar la patología de la manera más rápida posible. Para ello utilizaremos todos los medios que están a nuestro alcance
Estimamos que lo ideal es una revisión anual de nuestra vista que pueda orientarnos en como avanza nuestra visión y saber si podemos ver mejor. En el caso de los niños que utilizan graduación, entendemos que es conveniente, revisar cada 6 meses para comprobar si la corrección está consiguiendo el efecto deseado y si estamos mejorando en agudeza visual.
2 Comments
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